Cultivar en zonas con sol pleno al menos 6 a 8 horas diarias.
Regar cuando el sustrato esté seco en los primeros 3 cm. Mantener humedad constante en verano.
Requiere humedad moderada. No tolera suelos secos por periodos prolongados.
Ideal entre 20 y 32 °C. Debe protegerse en regiones donde la temperatura baje de 10 °C.
Sustrato universal con buen drenaje. Enriquecer con materia orgánica cada cambio de estación.
Aplicar compost orgánico o humus de lombriz cada tres meses.
Podar hojas secas y realizar cortes de renovación cada 4–6 meses para estimular nuevos brotes.
Se puede cosechar el follaje para destilar aceites esenciales o como planta repelente natural en jardines.